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From: Prontuarios Cuidados
Sent: Wednesday,
June 01, 1977 10:57 AM
Subject: Horacio
Otegui.
Avellaneda.
Virgo. Cabra de madera.
Desanda amaneceres hacia la nada.
Genufémino,
escribía y daba luz hasta que desapareció la forma.
El útero y la mujer toda.
Luego abrazó a una idea que lo atravesó.
No era la Idea de Hegel, sino una pequeña idea.
Una ideíta.
(Como su Patria, condenado al éxito...)
Se hace presente el suspiro profundo
y la sonrisa de cada mediodía.
y la sonrisa de cada mediodía.
Huele a jardín de árgomas o brezos, y quizás ambos sea.
Posó sus ojos a lo lejos y allá se quedan.
Vislumbró el Todo innúmero
y quedó cegado por el cero.
Descarrilla trenes. Sorbe pétalos y edificios en llamas.
y quedó cegado por el cero.
Descarrilla trenes. Sorbe pétalos y edificios en llamas.
Como el gas agón, muere a cada instante.
Sobreviviente pertinaz de mil suicidios fraudulentos,
Sobreviviente pertinaz de mil suicidios fraudulentos,
sonríe -rubicundo- y le duele en casi todas partes.
Necesita (de a ratos) diclofenac, paracetamol. Aspirina.
Persiste ese tremendo dolor en las rodillas.
Es una suerte que se vaya por las tardes.
Es una suerte que se vaya por las tardes.
No sirve de mucho. Se replica a sí mismo.
La floración, claro.
El sujeto (the Subject)
volverá.
La floración, claro.
El sujeto (the Subject)
volverá.
Y como antes llegará la primavera.
...
...
Aunque ocurre a cada rato,
este prontuario ha terminado.
Buenos Aires, Salita de tres.
Invierno 30, por lo menos.
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no comerciales. Por favor cite la fuente.
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